La Defensoría del Pueblo condena los ataques a periodistas de Cochabamba

La Defensoría del Pueblo condena los ataques a periodistas de Cochabamba

07 de Noviembre de 2020 10:50 am

La Defensoría del Pueblo condena los ataques a periodistas de Cochabamba

La Defensoría del Pueblo condena los ataques que sufrieron anoche periodistas de la ciudad de Cochabamba, cuando hacían la cobertura informativa de los bloqueos que protagonizaban vecinos y miembros de la Resistencia Juvenil Cochala, y recuerda que la Constitución Política del Estado y las convenciones internacionales protegen el trabajo de la prensa y la libertad de expresión.

Según la Federación de la Prensa de Cochabamba ocurrieron, al menos, siete casos de agresión de diferente índole al trabajo de los periodistas. Uno de los más graves fue, denunció esta organización, que un grupo de bloqueadores obligó a borrar imágenes que había tomado un fotógrafo de una agencia nacional de noticias.

En otros puntos, los trabajadores de la prensa fueron agredidos verbalmente con epítetos como “prensa vendida” y los manifestantes quisieron impedir la filmación de una discusión entre bloqueadores y personas que pretendían transitar por esos sitios.

Los bloqueadores pedían la restitución de los 2/3 en el reglamento de la Asamblea Legislativa y la anulación de las elecciones, reconocida por organismos internacionales, en las que ganó el MAS con el 55,10% de los votos.

La Defensoría de Pueblo recuerda que la Constitución Política del Estado protege la libertad de información así como la libertad de opinión y que el Estado tiene la obligación de dar garantías necesarias a los medios de comunicación y a la integridad de los trabajadores de la prensa, ante hechos como los ocurridos en Cochabamba, alguno de los cuales raya en la delincuencia. También alerta a la Policía para que cumpla sus obligaciones constitucionales.

Los estándares internacionales establecen que la libertad de expresión es la piedra angular de una sociedad democrática y que los Estados deben garantizarlas en sus dos dimensiones, individual y colectiva, es decir también el derecho de la sociedad a esta informada.